De la frustración y otras yerbas…
Muchos de nosotros hemos pasado por momentos de frustración, inclusive yo y otros tantos que vemos a diario en las redes sociales.
Hemos visto siempre a la frustración como una de las tantas emociones negativas que transitan en nuestra vida, y no es para menos ya que sus manifestaciones son tan intensas que te dejan por días pensando en si estas en el camino correcto o es el momento de abandonar el barco para irse a otros rumbos o quedarte paralizado sin hacer nada, mirando el horizonte…
Particularmente hoy, mientras decidí escribir esto, estoy atravesado por esta emoción y pienso una y mil veces si estoy en lo correcto.
Debo decir que el poder que uno desarrolla con los años de poder transitar, reconocer y determinar las emociones que nos afectan llega a ser sorprendente pero no deja de afectarnos en menor o mayor medida. Una de las salvedades que hay que tener bien presente es que las emociones, son transitorias, no duran eternidades y podemos regularlas con herramientas como la meditación o el mindfulness entre otros.
Cuando uno tiene la capacidad de reconocer las emociones, está atento a las circunstancias que nos rodean. Este “estado de alerta” nos permite alejarnos de la frustración por momentos, observar a la distancia y tomar acciones y englobando en un solo término decisiones.
MI ESTADO ACTUAL (FRUSTRACIÓN) + ESTADO DE ALERTA = DECISIÓN
Pero, ¿qué vamos a decidir?:
Vamos a decidir cómo nos tomamos la frustración, en este caso, negativa o positivamente, nos quedamos en ese estado emocional o salimos.
Debo admitir que es mucho más fácil, y con conocimiento de causa, quedarse sin hacer nada, esperando que alguien o cuestiones milagrosas vengan a salvarnos, pero la realidad que pocas veces sucede eso y por nuestros propios medios debemos salir.
Aquí les dejo 5 acciones que suelo utilizar cuando me encuentro con esta emoción:
- Conectar con mi raíz, volver a esos lugares que me hacen sentir feliz o recordar momentos agradables y sobre todo familiares. En mi caso suelo volver a mi ciudad de nacimiento, caminar o reunirme con personas que me hacen sentir querido.
- Optar por alguna actividad, una caminata, un paseo distinto, observando las cosas que están alrededor y que quizás no veías por la presión de lo cotidiano, detenerte en los detalles de la arquitectura, pensar en la historia de los lugares, etc.
- Respirar, y no ser exigente de que hay que estar en un lugar silencioso o contar con cierto recurso para realizarlo, me ha funcionado estar sentado en la sombra de un árbol, en la pileta solo y deteniéndome en el sonido de la naturaleza, respirando conscientemente.
- Hacer listas, suelo anotar mis propósitos, mis objetivos, mis sueños o anhelos. Por más pequeños o grandes que parezcan es muy útil escribirlos, clasificarlos y colorearlos. Estas listas despiertan nuestro interés y activan de cierta forma nuestras ganas de desenfocarnos para volver a enfocarnos.
- ¿Haces actualmente algo que te guste? Dedicarte tiempo de calidad para vos. Tiempo de calidad es tener minutos o horas para vos, solo o sola, permitiéndote hacer algo que a vos te guste mucho: leer, reírte, escuchar música, contemplar el paisaje o incluso dormir… pero sobre todo date el permiso de hacerlo en soledad para no depender de nadie y por una vez ser lo más auténtico/a que te salga. El camino lo elegís vos…
Podría seguir contándote de algunas acciones que tiendo a realizar cuando me encuentro con la frustración pero no es la idea aburrirlos, lo importante a rescatar, es que no te sientas solo/a o que solo a ti te pasa, somos muchos los que transitamos por esta emoción cuando no alcanzamos nuestras metas u objetivos. Hay que aprender a conservar la calma, observar y decidir.
Te invito si estás pasando por esta emoción o similar a coordinar para poder charlar y plantearnos acciones para salir adelante…
Gracias por leerme
Milton Neiffe
Comments
Tener fuerza de voluntad implica actuar y actuar significa esfuerzo, progreso y frustración.
Si acepto la frustración como parte de la vida y se aprende a tolerarla y manejarla la fuerza de la voluntad no se debilita.
Gracias por comentar Victor! Somos el resultado de nuestras victorias y derrotas. De todo se aprende.