POTENCIA TU LIDERAZGO PARA TRABAJAR EN EQUIPO:
Navegando en las redes es infinito el material que uno pude encontrar sobre liderazgo, sus formas o claves para destacar, y hoy quiero regalarles mi parecer respecto de este tema.
La adquisición de herramientas de liderazgo ha pasado a ser una herramienta y competencia laboral fundamental y necesaria para el desarrollo de los mandos medios dentro de las organizaciones.
La conjunción de diversas generaciones y la escasez de recursos comunicacionales dentro de las organizaciones hacen que liderar no sea una tarea fácil.
Hoy quiero regalarte 3 claves para lograr un liderazgo positivo que te permita entender y comprometer el accionar y la sinergia de tu equipo:
- Comunicación: es fundamental implementar estrategias comunicacionales, analizar cómo estamos comunicando las acciones: ¿imponemos, consensuamos o participamos? Los miembros de nuestro equipo necesitan sentirse parte del accionar. Requieren ser capaces de establecer diálogos fluidos, concretos, claros y precisos de lo que se espera de ellos. No dejando diálogos a la libre interpretación y cargándolos de una responsabilidad que no les corresponde. Son protagonistas, pero la luz en el faro es el líder.
- Asertividad: nada más acertado que generar espacios de comunicación y si le sumamos el plus de que sea de manera asertivo, nos posiciona en un lugar de líder sobresaliente. El ser asertivo se considerada una habilidad social que requiere el ejercicio de generar conversaciones respetuosas, sin imponer mi postura de manera autoritaria, más bien desde el respeto del otro.
- Compartir los logros: ¿te ha pasado de trabajar en un equipo y luego de arduas tareas llegan al objetivo y no les contaron como les fue? Nunca llego el feedback sobre las tareas realizadas, no sabemos si las hacemos bien, restándole importancia al esfuerzo conjunto para alcanzar los objetivos planteados. Compartir los logros forma parte de las tareas que un buen líder debería tener en cuenta. Generar ese espacio de feedback donde se ponen en la mesa los puntos fuertes, las debilidades y porque no las alegrías obtenidas.
Como verán estas acciones no son más que desarrollar habilidades sociales que nos permitan acompañar a los miembros de nuestro equipo de manera más humana y cercana, sin la necesidad de establecer lazos de amistad.
Convengamos que ser buena persona no tiene precio y pensar en cómo queremos ser recordados es un buen punto para comenzar a reflexionar.
Si actualmente te encuentras liderando un equipo, o deseas alcanzar un puesto, que implique desarrollar habilidades de liderazgo, no dudes en contactarme para que podamos trabajar en ello.